En el Cantar de Mío Cid se narran las aventuras que tiene que pasar el héroe cuando es desterrado de su tierra castellana por el rey Alfonso VI; buena parte del cantar discurre en las tierras musulmanas pertenecientes al reino de Zaragoza, hoy dentro de Aragón. En el mapa se recoge el itinerario que el Cid recorrió según el Poema en la década de 1081 a 1091 al frente de una serie de guerreros que le acompañaron en el destierro.
Dada la ruta seguida por el Cid, es preciso destacar la abundancia de topónimos aragoneses que aparecen reflejados en el Poema; el Cid entra en el actual Aragón por el valle del Jalón, atravesando las localidades de Ariza, Cetina, Alhama, Bubierca y Ateca, instalándose en un otero que domina el Jalón, frente a la localidad musulmana de Alcocer, que en la actualidad es un despoblado entre Ateca y Terrer. En el cerro conocido cono Torrecid, Rodrigo Díaz de Vivar instaló un campamento, que se descubrió en 1986, y desde el cual conquistó Alcocer.
El Cid continuó por Terrer y Calatayud hasta Daroca, y de allž marchó al alto valle del Jiloca, instalándose en un alto cerro, el de San Esteban, en la localidad de El Poyo del Cid; en la cima del cerro todavía quedan restos, al igual que en el Otero del Cid, de la construcción de los castellanos para defenderse en un medio hostil.
Una vez instaladas en el Poyo, las tropas del Cid realizaron una serie de correrías, sin duda en busca de botín, por las tierras próximas, en poder todas ellas de los musulmanes; así, realizarán algaradas contra los moros de Cella, Teruel y Molina, recorriendo además las tierras de Huesa del Común, citada en el Cantar erróneamente como Huesca, Monforte de Moyuela, citada como Monzón, o Alcañiz de la Huerva, un despoblado de la comarca de Cariñena, en el curso del río Huerva, que se ha confundido con el Alcañiz del Bajo Aragón.
Después de permanecer algunas semanas en el Poyo, el Cid y sus mesnadas se trasladan al puerto de Alucat, que para unos es la localidad de Olocau, en la actual provincia de Castellón, y para otros la zona de la laguna de Gallocanta, entre las provincias de Zaragoza y Teruel. El Cid derrota a las tropas del conde de Barcelona Berenguer Ramón el Fraticida en una batalla que tiene lugar en el pinar de Tévar, seguramente en la provincia de Teruel, en donde cae prisionero el propio conde de Barcelona.
Son muchos nombres de topónimos aragoneses los que aparecen en el Cantar; la mayor parte de estos topónimos han sido identificados con localidades actuales, y otros corresponden a restos y yacimientos arqueológicos también descubiertos, pero en todo caso, la geografía aragonesa que se describe en el Cantar viene a coincidir casi miméticamente con la geografía aragonesa de los valles del Jalón, Jiloca y tierras de Teruel, lo que hace suponer que el autor del Cantar tenía un conocimiento exhaustivo de las tierras aragonesas.